Por una vez me voy a permitir el lujo, no
sólo de escribir, si no de no dirigir mis palabras a mis compañeros, si no a
todo aquel que guiado por estereotipos y demás mitos de la caverna nos miran,
nos juzgan y, por qué no decirlo, nos insultan continuamente sin ni siquiera
haber coincidido cinco minutos en un ascensor para hablar del tiempo... o de
fútbol. Que no se me malentienda, no busco crear conflicto, ni replicar sus
juicios de valor totalmente desfasados, sólo quiero borrar todo esos
estereotipos que en el escaso periodo de tiempo de un año, caen como granizos
sobre nuestras personas.
Todo comenzó cuando un grupo de gente,
chavales en su mayoría, salieron a la calle pidiendo un cambio en el sistema,
que no de partido; el problema es sistémico y no de color. Al principio se
trató de esconder, “son cuatro gatos” dirían algunos. Como se acercaban las
elecciones, los politiquillos empezaron a ponernos distintos jefes, creo
recordar a algún periodista, al cual no pienso nombrar, que hablaba de que
éramos la Kale Borroka, y que estábamos al servicio
de una banda terrorista. Como es normal, esta idea, no caló más allá de
Intereconomía y alguna que otra radio “democrática”. Esto sólo fue el
principio, luego llegaron con la excusa de que Izquierda Unida era quien nos alentaba, por
favor...esta idea es aún menos creíble que la anterior. Por último el tercer
jefe impuesto a la fuerza por los mismos actores de la derecha mediática, el
MISMISIMO RUBALCABA.
El problema de la perdida de credibilidad y de fuerza, que
en un primer momento dieron el empujón al 15M, surge en parte causado por esta
etiqueta de mantenidos de Rubalcaba, lo cual visto en retrospectiva suena
absolutamente absurdo, porque a una semana de las elecciones municipales, con
el PSOE roto, una crisis del sistema que nos azota, en qué cabeza cabe la
perversa idea de que el propio Rubalcaba, y por lo tanto el PSOE, va a
movilizar a la calle en su contra, la calle se movilizó sola contra la clase política. A pesar de las evidencias, la
prensa, seguía con sus ataques contra nosotros, y llegó por fin la mayor
etiqueta, que pesa como cien Ritas Barberás subidas en tu chepa, el
término........ PERROFLAUTA.
¿Que se entiende por perroflauta?. Da
igual, eso a nadie le importa, les basta con decir que somos guarros, que NO
queremos trabajar, que fumamos porros, que somos inconformistas, unos niños de
papa mantenidos y por supuesto, no puede faltar jamás el tener rastas, una
mascota y saber tocar un instrumento. He de decir que para mí, identificar a
todas las personas que se manifiestan, que protestan, que acampan y que LUCHAN,
bajo el nombre de perroflauta, sin siquiera saber que es cada uno de ellos, me parece de una desorbitada
estupidez, sólo aptas para marionetas del sistema. (Véase Belén Esteban y sus
coleguitas periodistas).
La imagen del activista tipo del 15M ha
sido degradada hasta tal extremo que el término persona ya no forma parte de la
definición de perroflauta. Con sus insultos olvidan que, aparte de toda ideología,
de todo color político, en el fondo somos personas, simples personas como
cualquier otra, con nuestras aficiones, nuestros problemas, en general con una
vida fuera de la lucha política. Es importante resaltar este asunto, puesto que
se critica mucho al activista por estar días en la plaza, en la calle, en
resumen, ejerciendo como pueblo, ignorando a veces, que apoyar ciertas
acciones, acudir a ciertos actos, merma de forma significativa la economía de
la persona, por ejemplo con multas y denuncias (que en la mayoría de las veces resultan
ser falsas o injustificadas), la pérdida de sueldo, pérdida de clientes por el
simple hecho de actuar en consecuencia a unas ideas, una forma de vida.
Como todo, la visión general sobre los
perroflautas ha variado con el paso del tiempo, paso de la ignorancia y la
sorpresa de los primeros días de acampada, hasta el menosprecio y la humillación
por parte de sectores influyentes de la sociedad. Este menosprecio y humillación
trae consigo los insultos y las agresiones, y aquí es donde tengo que mostrar
mi más sincera admiración, puesto que salvo excepciones, los insultos y las
agresiones han sido contestados de forma pacifica y respetuosa. Esta deshumanización
del movimiento, hace que se olvide que detrás de cada insulto, hay una persona,
una persona que se siente mal, que se siente humillado, que no comprende por qué
haciendo algo que considera correcto, y que no es sólo para él, si no que mira
por el conjunto de la sociedad, recibe tales calumnias.
En estos momentos el movimiento pasa por
una racha donde, después de doscientos cincuenta y seis entierros, mas o menos,
vuelve a resurgir como la alergia en la primavera, se está cociendo una auténtica
revolución de conciencias, donde la sociedad en su base se está dando cuenta de
cómo funciona este mundo y no se conforma con migajas como hasta ahora.
Es nuestro momento, nuestra obligación histórica,
ellos lo saben y nos temen por ello, de ahí la necesidad por su parte del uso
de estereotipos y prejuicios absurdos, para que la masa aborregada, aún
mayoritaria en este pseudopaís democrático, siga pensando que el político tiene
la razón y el pueblo es un peligro. Ahora reforman la ley penal, para que estar
en el suelo formando una cadena por los brazos sea delito grave, que proponer
un acto por internet sea pertenencia en asociación criminal, utilizan la
doctrina del miedo, propia de cualquier dictadura fascista.
Me gustaría mandar un mensaje, claro y
contundente, NO TENEMOS MIEDO, sabemos que tenemos la razón, sabéis que la
tenemos. Cambiar las leyes, reprimirnos, amenazarnos, da igual lo que hagáis,
somos más y lo sabéis, tenemos fuerza y nos teméis. Si queréis jugar, juguemos,
la partida ya ha empezado, partís con ventaja, pero aún así nos veremos en la
calle, la historia nos pondrá a cada uno en nuestro sitio.
Sin más divagaciones me despido, diciendo
lo que pienso de este país; seguid viendo telebasura, consumiendo por consumir,
y estigmatizando un movimiento social que esta haciendo historia. No somos
terroristas, ni peligrosos por mucho que digan. Sólo somos el PUEBLO y vamos
por VOSOTROS.
Para Eli... una perroflauta algo pureta..
Gracias!!
Escrito por Rolando Muñoz
1 comentario:
Sí, Rolan, coinicido plenamente con lo que expones. Comprendo el desprecio hacia nosostros por parte de los que están arriba. Es lógico, es su silla la que se mueve, sin embargo,no consigo entender el desprecio proviniente de los demás hacia personas que están dejando parte de sus vidas por mejorar las de todos. Comprendería el desacuerdo pero no el desprecio. Es algo que mi cabeza no deja de analizar para ver si encuentro una respuesta. Sigo en ello. Saludos.
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