miércoles, 31 de agosto de 2011

Hasta siempre, comandante



Cine, bancos y crisis (no necesariamente por ese orden)

Las uvas de la ira
( No serán necesarias muchas explicaciones para comprender 
lo que está ocurriendo, antes y ahora.)




                                   Hay una expresión que últimamente se está comportando como esas moscas gordas, lentas, verdes, que en las tardes de verano se dedican a revolotear asquerosamente alrededor de nuestras orejas: los mercados. Una especie de ente inefable, inaprensible, dotado de connotaciones religiosas, y que cuando habla produce el mismo efecto que los antiguos oráculos, el oráculo ha hablado, los mercados han dicho... la confianza de los mercados, la desconfianza de los mercados, la opinión de los mercados, el diagnóstico de los mercados... Y todos nosotros, los pequeños hombrecillos, esperando aterrados la voz de los mercados. Y parece como si no pudiéramos definirlos, o peor aún, como si estuviese prohibido identificarlos. Las uvas de la ira es una película de 1940 dirigida por John Ford. En ella se nos cuenta la historia de una familia que tras estallar la crisis de 1929, son expulsados de su tierra y se ven obligados a iniciar un viaje desesperado hacia California... penurias, vicisitudes... no existe el paraíso; esta película está basada en la novela homónima de John Steinbeck. Una vez más las grandes obras clásicas acuden en nuestra ayuda para obligarnos a comprender.


 ¡Qué bello es vivir! 
 
                                     Qué bello es vivir (It´s a wonderful life) es una película dirigida por Frank Capra en 1946. Es una de las grandes obras de la historia del cine. Emitida en multitud de ocasiones en la fechas navideñas. Aunque algunos la han tildado de ñoña, de cursi, no cabe duda que en sus entrañas late con fuerza un mensaje necesario: aquel que destapa el poder del dinero, el poder de los bancos, y las terribles desigualdades e injusticias que ese poder produce, alienando y convirtiendo en simples números, simples mercancías, a los seres humanos normales y trabajadores. He aquí esa verdad, de forma desnuda...


Spain is diferent



Wikirebels (documental sobre Wkileaks)



Manifestación en Jerez contra la reforma constitucional





                     Convocados por el 15M de Jerez, este pasado domingo estuvimos manifestándonos por el centro de la ciudad unas 300 personas en favor de la celebración de un referéndum para que los ciudadanos podamos decidir acerca de si hay que reformar o no la Constitución en relación con ese eufemismo conocido como “techo del gasto”.

En el manifiesto leído en la Plaza del Arenal se dijo que lo que está ocurriendo, aunque el PP y el PSOE tratan de ocultárnoslo, es que España está en una situación de bancarrota y que se está procediendo, a las bravas, a un “rescate”, es decir, a aplicar un plan económico impuesto desde arriba por el que el paro continuará, la deuda crecerá y el llamado “estado del bienestar” desaparecerá de inmediato a favor de los grandes y voraces intereses financieros.

Nos someten a todos al libre mercado: que cada uno se pague su sanidad, su escuela, su pensión, etc. Pero antes de hacerlo se organiza un descomunal desfalco de las arcas públicas. Bien, todo esto es conocido, como también lo es la peligrosa situación social creada más la inoperancia (o, más bien, complicidad) de las estructuras políticas al uso... que hacen lo que hacen pero no recortan, por ejemplo, los grandes gastos militares de este país.

El caso es que desde el 15M estamos dispuestos a responder, democrática y pacíficamente, denunciando esta situación de extraordinaria violencia a la que pretenden someternos. No se puede reformar la Constitución si no es con el consentimiento de la ciudadanía. Lo contrario es un golpe de estado en toda regla. ¿Además del trabajo, la vivienda, etc., pretenden también arrebatarnos la dignidad ciudadana de poder decidir sobre las cosas importantes de nuestra sociedad y de nuestro futuro?. Aunque suene a broma, el PP y el PSOE están actuando en este asunto con nocturnidad y alevosía sin límites.

No se quiere reformar la Constitución para crear empleo, asegurar los ingresos necesarios para las arcas públicas, asegurar la vivienda de los ciudadanos, garantizar la calidad de la enseñanza pública, etc., sino que se pretende reformar la Constitución para formalizar un inmenso trasvase de dinero público a manos privadas. Esta situación, a la que llaman “crisis” o “plan de ajuste”, sólo tiene una ventaja –sólo una– para la mayoría ciudadana: deja al descubierto, de forma clara, cuáles son las verdaderas intenciones de los poderosos.

Este otoño, como en mayo y junio, debemos hacer en España lo que los ciudadanos árabes están haciendo en todo el norte de África, a saber, una fiesta de la democracia, de la libertad, de los derechos humanos, de los intereses colectivos frente a la avaricia y la locura de los bancos. El bien público y la dignidad de los ciudadanos es lo primero, por eso el referéndum es un derecho exigible. Democracia real ya.

Cristóbal Orellana (de Noviolencia Ahora - Jerez)

martes, 30 de agosto de 2011

José Luis Sampedro: Yo acuso

Carta a 
Don José Luís Rodríguez Zapatero
 
Yo acuso
p o r
José Luis Sampedro




Al Presidente del gobierno de España,
y al resto de las señorías que portan la representatividad parlamentaria.

Señor presidente,
permitanme dirigirme a usted para comentarle mis más profundas inquietudes que, por mi honor y conciencia, me impiden quedarme al margen de los hechos relativos a nuestra Constitución amenazada por una vergonzosa e imborrable mancha.

Habéis realizado un gobierno durante sus dos legislaturas en las que muchos podemos estar en contra o a favor de su gestión frente del ejecutivo que preside. Habéis cometido aciertos y errores, estos últimos desgraciadamente más numerosos en su último periplo presidencial. Sus gestiones pueden ser criticadas o avaladas desde todos los frentes que los ciudadanos deseen pronunciarse.

¡Pero que mancha de cieno sobre vuestro nombre -iba a decir sobre vuestro reino- puede imprimir esta abominable reforma constitucional! Por lo pronto usted decide reformarla mediante una llamada telefónica al señor Mariano Rajoy, presidente del principal partido de la oposición, tomando ambos la representatividad parlamentaria como un absolutismo de dos dirigentes, dando bofetada suprema a toda justicia. Y no hay remedio, España conservará esa mancha sobre su carta magna y la historia consignará que semejante crimen social se cometió al amparo de vuestra presidencia.

Puesto que ha obrado tan sin razón, hablaré. Prometo decir toda la verdad y la diré si antes no lo hace el tribunal con toda claridad.

Es mi deber: no quiero ser cómplice. Todas las noches me desvelaría el espectro de la ciudadanía que expía a lo lejos cruelmente ultrajada, una reforma que no ha decidido.

Por eso me dirijo a vos gritando la verdad con toda la fuerza de mi rebelión de hombre honrado. Estoy convencido de que la ciudadanía no ignora lo que ocurre, entonces ¿a quién denunciar este afrenta malhechora de verdaderos culpables sino al primer soberano de la carta magna, al Pueblo?
Ante todo la verdad acerca de nuestra carta magna y su proceso de reformarla.

Nuestra Constitución, nacida en 1978, promulga en sus artículo primero del título preliminar:
“España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político”.
Agentes externos a nuestro ámbito constitucional, la señora Merkel y el señor Sarkozy, han dictado los cambios que usted promulga, auspiciados aún si cabe por entidades externas y opacas a la ciudadanía, no sólo de nuestro Estado, sino del resto de los ciudadanos miembros de la Unión Europea.

Señor presidente del gobierno y señor presidente del principal partido de la oposición:
No recuerdo que en ninguna de las legislaturas, en las que ustedes han sido elegidos como representantes de los ciudadanos (ni anteriormente tampoco), hubiese en algún proceso electoral papeletas para proceder a legitimar a estas personas (la señora Merkel y el señor Sarkozy) sobre nuestro ordenamiento legal, jurídico y constitucional.

Igualmente me consta, en ninguno de sus respectivos programas electorales, ninguna intención de reformar la Constitución.

Ante este hecho y sus intenciones, ustedes han puesto la forma política dictada por la Constitución (representación parlamentaria) muy por encima de la soberanía establecida en la carta magna (el pueblo) documento que regula las normas y convivencia en nuestra nación.

Al ejercer su disciplina partidista, sr. Zapatero y sr. Rajoy, en la que los señores y señoras parlamentarias únicamente promulgan el deseo de sus líderes (en el presente caso ustedes), vuestras señorías son responsables y ejecutores del crimen que les expongo.

De forma sorpresiva, en periodo estival, con un Parlamento en funciones, donde las señorías preparan las maletas fuera del hemiciclo ante la próxima cita electoral, ustedes pretenden modificar la Constitución sin consultar a sus soberanos.

Ustedes sobrepasan con sus intenciones el artículo primero del título preliminar de nuestra constitución. Su reforma no es para un “Estado social” y sus formas no son, ni mucho menos, “democráticas de Derecho”.

Tal es la verdad, señores parlamentarios, verdad tan espantosa, que no dudo de que quede como una mancha en vuestra representatividad. Supongo que no tengáis ningún poder en este asunto, que seáis prisioneros de los mercados y de los poderes que os rodean; pero tenéis un deber de ciudadano en el cual meditaréis cumpliéndolo, aunque dudo que honorablemente. No creáis que desespero del triunfo; lo repito con una certeza que no permite la menor vacilación; la verdad avanza y nadie podrá contenerla.
Hasta hoy no perpetrabais el proceso, pues hasta hoy no han quedado deslindadas las posiciones de cada uno; a un lado los culpables, que no quieren la luz; al otro los justicieros que darán la vida porque la luz se haga. Cuanto más duramente se oprime la verdad, más fuerza toma, y la explosión será terrible. Veremos como se prepara el más ruidoso de los desastres.

Señor Presidente, concluyamos, que ya es tiempo:

Yo acuso
al Banco Mundial, FMI, OCDE y demás organizaciones supranacionales y externas al gobierno europeo de ser los organizadores de este crimen. Ninguna de ellas elegidas en representatividad por el Pueblo de un Estado, el nuestro, sobre el que quieren reformar la Constitución.

Acuso 
a la UE y al BCE de ser garantes dentro del territorio europeo de este complot.

Acuso
a Standard & Poor’s y a Moody’s como cómplices y beneficiarios de este acto.

Acuso
al conjunto de la banca europea y nacional como lobby cómplice y beneficiarlo de esta infamia.

Acuso 
a la señora Merkel y al señor Sarkozy por inducir a perpetrar este vil atentado a nuestra soberanía.

Acuso
a aquellas empresas que junto con la banca presionan a sus señorías para dejar de ejercer la representatividad de sus soberanos, ejerciéndola sobre sus intereses económicos.

Acuso
a aquellos políticos cuyo máximo interés es mantenerse en el cargo que ejercen a cualquier precio, tan indignantes como el del crimen que nos ocupa.

Y por último:

les acuso 
a ustedes por proponer esta modificación de espaldas a la ciudadanía. Ciudadanía que avala, es garante y soberana tanto del Estado español como de su carta magna. Ustedes que, mediante una simple llamada telefónica, ultrajan la inviolabilidad de una Constitución, inviolabilidad que defendieron cuando no se han atrevido a mantener su vigencia, adecuándola a las realidades sociales. Ustedes que juraron o prometieron sobre ella.

Se atreven a modificar el máximo documento del Estado en aras del “Mercado”. Mercado al que pretenden calmar mientras las voces del pueblo son ignoradas o silenciadas.

Puede que éste crimen ejerza el efecto que ustedes esperan, pero no ignoren las victimas consecuentes. Habrán convertido la Constitución en un simple panfleto al que poner a cotizar en los mercados de valores, habrán convertido el espíritu de la transición española no en un garante de paz y democracia social como fue en su día, sino en un mero informe de resultados macro-económicos. Y habrán convertido a la ciudadanía española en un pueblo sin su máximo referente de legalidad moral y convivencia al subvertir los valores representados en ella por cifras monetarias inducidas fuera del espíritu en el que se redactó.

Distinguidas señorías, en nuestro Estado, no sólo hay que ser demócrata, también hay que parecerlo y sus formas distan mucho de ello. Desde hace mucho tiempo no resuelven entre ustedes la composición del Tribunal Constitucional y resulta que sí resuelven en minutos modificar el texto sobre el que basar sus juicios. Lo dicho señorías, también hay que parecerlo.

Sólo la ciudadanía tiene el derecho, tiene el deber, de mantener vigente este documento, ustedes han de darles los medios. Ustedes, la clase política, que no sólo por activa ahora perpetran este crimen que nos ocupa, sino que por pasiva en las últimas décadas no han dado un paso para mantener su vigencia, y mucho menos aún, consultar al Pueblo al respecto.

No ignoro que, al formular estas acusaciones, arrojo sobre mí el peso y decisión del máximo soberano del Estado del cual ustedes se supone que representan. Y voluntariamente me pongo a disposición del Pueblo.

En cuanto a las personas a quienes acuso, debo decir que ni las conozco ni las he visto nunca, ni siento particularmente por ellas rencor ni odio. Las considero como entidades, como espíritus de maleficencia social. Y el acto que realizo aquí, no es más que un medio revolucionario de activar la explosión de la verdad y de la justicia.

Sólo un sentimiento me mueve, sólo deseo que la luz se haga, y lo imploro en nombre de la ciudadanía, que ha sufrido tanto y que tiene derecho a ser feliz. Mi ardiente protesta no es más que un grito de mi alma.

Que se atrevan a llevarme a los ciudadanos y que me juzguen públicamente.

La revolución no será televisada

No podrás quedarte en casa tronk@
no podrás enchufarte para desconectar
no podrás fliparlo y cuando lleguen los anuncios
ir a mear y a buscar más cerveza,
porque la revolución no será televisada.

La revolución no saldrá en portada en los noticieros

no será ofrecida en jornadas por gentileza del BBVA
como episodios de un serial con final ambiguo.
La revolución no mostrará a Zapatero sonriente
ante su harén de ministras posando para Vogue
ni a Esperanza Aguirre contando chascarrillos
y celebrando con sus imputados la victoria,
ya que la revolución no será televisada.

La revolución no será un experimento sociológico

narrado por Mercedes Milá, no estará interpretada
por Penélope Cruz, Javier Bardem ni Buenafuente.
No lavará más blanco, no afirmara tus glúteos.
La revolución no acabará con tus granos.
No te sacará más delgada ni más atractivo, ya que
la revolución no será televisada, je je.

No habrá jugador número doce de la revolución

no conquistarás el mundo desde el sillón de tu casa.
La revolución no dará ruedas de prensa,
no hará declaraciones ni encuestas a pie de urna
no será diseccionada por los tertulianos
porque la revolución no es una campaña.

No hará falta repetir la jugada para aclarar

si se hallaba o no fuera de juego.
No saldrán Toxo y Méndez levantando el puño
cuando el capital tire de los hilos.
No verás a Esteban Ibarra acampando en Sol
con las galas rojiverdes del mercado de la historia
denunciando a la mano que lo alimenta.

No habrá Casa de tu vida, Supervivientes ni Triunfitos

coloreando la rutina gris de tus días,
la audiencia ha decidido que debe abandonar la casa
para construir en las calles el Sol del futuro
vivir el sueño antes que soñar la vida
pues la revolución no es un reality show.

Los focos de la noche se alzarán contra los iluminados

no habrá artistas, terroristas ni mercados al alza
no habrá reyes campechanos ni princesas del pueblo.
La banda sonora de la revolución no será escrita
por Teddy Bautista, ni interpretada por Sabina Ramoncín
la revolución no será filmada por manchegos universales
no recibirá ningún premio para cerrar este noticiario.

La revolución no volverá después de la publicidad.

No será interrumpida por escándalos y terremotos.
No tendrás que preocuparte por la gripe de los cerdos
te sentirás limpia porque tu lo vales y te daban dos.
La revolución no es de limón ni de naranja.
La revolución no aumentará el tamaño de tu pene,
pero tendrás que jugártela en vivo.

La revolución no es un programa de televisión.

La revolución no será televisada.
Solo pasa lo que vives tronk@
y lo que vives pasa,
pero tendrás que jugártela en vivo.



(tomado de: http://nohabiafuturo.blogspot.com/)

El otro viaje del Papa...

Un sueño: 

 

 El otro viaje del Papa... 

y alguna reformilla de la Constitución

  p o r  

Luis Enrique Ibáñez 

 

Ya hace una semana que finalizó Su visita, pero fue anoche cuando tuve un extraño sueño. En él se mezclaban confusas imágenes, insólitas, que se abrazaban en silencio con recuerdos inexistentes y deseos frustrados. Intentaré relatar algunas de ellas.

En la primera pude ver al Papa al bajar del avión recién llegado a España. Antes de saludar a ninguna autoridad, oteó el horizonte, observó todo el protocolo del recibimiento y, después de unos breves pero fecundos segundos, ordenó amablemente retirar todo el boato pomposo de esa puesta en escena ahíta de lujo y ostentación.

En la segunda escena que más o menos puedo recordar, le ordenaba al cardenal Rouco Varela que le preparase una reunión con los presidentes de los principales bancos de España. En dicha reunión, el Papa rechazaba la financiación que esos bancos habían realizado para costear las JMJ, y con un tono airado les pidió que utilizaran ese dinero para frenar la sangría de desahucios que se estaban produciendo en nuestro país. Cuando el presidente del Banco de Santander quiso intervenir, le mandó callar, le dijo que no había terminado, y añadió que esperaba que, a partir del día siguiente, todos los grandes bancos españoles aceptaran la dación en pago, y no volvieran nunca más a intentar seguir chupando la sangre a seres humanos, que ya estaban padeciendo bastante humillación al quedarse sin un lugar donde vivir. Y cuando ya los presidentes se disponían, cabizbajos, a abandonar la reunión, el Papa les gritó:  

"Eh, un momento... recuerden... 
es más fácil pasar un camello 
por el ojo de una aguja, 
que entrar a un rico 
en el Reino de los Cielos..."
 
Otra escena curiosa que aparecía en mi sueño mostraba al Papa suspendiendo la comida oficial que iba a tener lugar. Pidió que le llevaran a los barrios más pobres de Madrid y a los albergues sociales frecuentados por mendigos y demás. En esos lugares (y vestido de paisano, sí, lo recuerdo) repartió ropa, alimentos y dinero. Lo hizo, pero les recordó a todos que lo hacía para demostrarles su amor, pero que esa acción en realidad no servía para nada. Les dijo que lo que debían hacer era exigir justicia, y no limosna, y que recordaran constantemente a todo el mundo las palabras de Jesucristo cuando afirmaba que 

"el que tenga dos túnicas, que le dé una al que no tiene".

Por la tarde, ya sí, el Papa se reunió con los jóvenes católicos. Lo primero que hizo fue ordenarles que no se mostraran tan orgullosos y que debían hacer gala de humildad y tolerancia, que debían ser más tolerantes que nadie. Que se mezclaran con la gente, que no se mostraran como un grupo cerrado. Les conminó a visitar la periferia de Madrid, a hablar con las personas, a preguntarles cuáles eran sus problemas, qué necesidades tenían. Les dijo que se apartaran de todo lujo, y de cualquier círculo de poder. Y, por último, les recordó aquellas palabras de Jesús a sus discípulos,  

"... al que quiera pleitear 
contigo 
para quitarte la túnica 
déjale 
también el manto; 
y al que te obligue a andar 
una milla 
vete con él 
dos. 
A quien te pida 
da, 
y al que desee que le prestes 
algo 
no le vuelvas 
la espalda."
 
A la mañana siguiente, el representante de Dios en la tierra, visitó varias ONG (entre ellas, Médicos sin Fronteras), asociaciones de inmigrantes, albergues para jóvenes inmigrantes, la sede Stop Racismo, la casa de Senegal... y otras instituciones similares. También se acercó a las comisiones de trabajo del 15M en Sol. Pasó toda la mañana y parte de la tarde hablando (sobre todo escuchando) con las personas que pudo encontrar en las distintas sedes. Quería conocer su visión de la realidad, qué pensaban sobre los problemas de África, sobre la falta de comida, de agua, de medicamentos en gran parte del planeta... Ya por la noche, llamó a Rouco Varela, solo para pedirle que convocara una rueda de prensa para la mañana siguiente, temprano.
Dicha rueda de prensa duró solo un minuto. Un minuto para que Benedicto XVI pidiera públicamente una reunión urgente con los máximos representantes del Fondo Monetario Internacional, del Banco Mundial, del Banco Central Europeo, del Organización Mundial del Comercio y de la Unión Europea (y algunas instituciones más que no recuerdo). Afirmó que iba a exigirles un cambio radical en sus políticas, en su funcionamiento, y si no... su desaparición inmediata. "Era intolerable -afirmó- que cada día murieran más de 23.000 personas por falta de agua potable, comida y mediamentos."
 
Desperté, triste, situado de nuevo en esta realidad terca y violenta, y me choqué humillado con el ultraje que unos príncipes absolutistas (voceros y esclavos de otros reyes mayores) se disponían a perpetrar a la Constitución y a las generaciones futuras (mi hija).

Tomé un café y encendí un cigarro. Y me quedé pensando (si nos lo proponemos, todavía podemos hacerlo). Me preguntaba que si es tan fácil hacer una reforma de la Constitución, ¿por qué no hacemos otra (en otro periquete) en la que establezcamos en vez de unos techos de déficit, unos mínimos de gasto (que sean altos, por favor) en Educación, Sanidad, Asuntos Sociales, Ayudas al Desarrollo...?
Y otra reforma más, tipo pispás, otra en la que marquemos unos mínimos (que sean muy altos, por favor) de gravamen fiscal sobre las grandes fortunas, los grandes capitales, las grandes empresas. Y en otra, o en la misma, da igual, unos mínimos (que sean altísimos, por favor) de impuestos fijos a los bancos.
El contraste entre sueño y realidad me produjo una tristeza infinita y un extraño mareo. Sin embargo, a los pocos minutos me repuse, y me obligué a creer que todavía nos queda el pensamiento, la palabra, la acción... si no nos resignamos a ser meros consumidores pasivos que habitan, como fantasmas, en el siniestro templo de los mercaderes.

En la película De dioses y hombres, los miembros de una comunidad de monjes se quejan a su prior, después de que este hubiera tomado una decisión de forma individual, sin consultar a nadie:

No te elegimos para que decidieras solo.

Pues eso. 


(Para leer más: http://dueloliterae.blogspot.com/ )




San Pablo a los Corintios:
"Ya podría yo hablar las lenguas de los hombres y de los ángeles; pero si no tengo caridad, no soy más que un metal que resuena o unos platillos que aturden.    
Ya podría tener el don de profecía y penetrara todos los secretos; y aunque poseyera todo el saber y fuera mi  fe tan grande como para mover montañas, si no tengo caridad, no soy nada.  
Aunque repartiera en limosnas todo lo que tengo y aun dejarme quemar vivo, que si no tengo caridad, nada soy."
...    
"Cuando yo era niño, hablaba como un niño, sentía como un niño, razonaba como un niño. Cuando me hice un hombre acabé con las cosas de niño." 




lunes, 29 de agosto de 2011

Una tirada, 
 acertada,
de dados 
no invalida el azaR,
ni aún 
en el planificado futurible 
del capitalismo taro

Hombre blanco hablar con lengua de serpiente



Asesinato colateral



Este es el video que filtró Bradley Manning a Wikileaks 
y por el que está en una prisión militar en Estados Unidos 
acusado de espionaje.

La ira de los frustrados




Arroja
...fuego al fuego,
noche a lo negro,
rabia al odio,
azar al acaso,
y no mires atrás
con remordimiento, 
añoranza o ira.
Presta
...sentido a la palabra,
sal a la llaga,
amor al amor,
sin anticipar culpa,
sin nostalgia de futuro.
Sin mañana, ni ayeres:
límpido... :
eres ya
fuego arrojado:
escoge cuchillo
para tus quince minutos
de valor.

¿Quién es tu enemigo?

¿Quién es tu enemigo?

Esto es una llamada. 


Estamos viviendo la inminencia de una catástrofe económica, social y cultural. Una convulsión en la historia como no la ha habido desde el siglo XVIII. Todos los datos económicos indican que este otoño se volatilizarán 20 billones de euros. Tantos o más que en el 2007. 


Pero ahora ya se han agotado los recursos, ningún país podrá endeudarse para rescatar ni a la banca ni a las multinacionales: 


- Estados Unidos tiene de deuda soberana 16 billones de dólares, una suma igual a su producto interior bruto anual (PIB); pero su deuda privada (de banca y empresas) alcanza la cantidad de más de 75 billones de dólares, bastante más que el PIB mundial.


- China es la principal compradora de deuda estadounidense, cuando Estados Unidos no pueda hacer frente a sus pagos arrastrará a China, además a causa de la recesión económica las exportaciones chinas han mermado considerablemente y su mercado interior no tiene poder adquisitivo para consumir las mercancías que produce.


- Brasil y otros países emergentes están en las mismas circunstancias o peores que China.


- Europa está herida de muerte por los ataques especulativos contra la deuda soberana. Uno tras otro irán cayendo cada país europeo como fichas de dominó sobre Alemania, la última ficha, aplastada por las demás.


Adivina quiénes son las víctimas de este feroz y fríamente deliberado ataque.
Imagina a qué se verán impulsadas esas víctimas cuando perentoriamente se sientan acuciados por las necesidades vitales más esenciales. 

Los recientes disturbios de Inglaterra son un pequeñísimo adelanto.

La Historia nos ilustra la respuesta a estas dos preguntas:


En 1816 la fragata francesa Medusa naufragó en el Atlántico frente a Senegal por la negligente incompetencia del capitán y oficiales. Éstos acapararon alimentos, bebidas y los botes salvavidas, abandonando al resto de la tripulación. Sobre 150 marineros se encontraron en la necesidad de armar una precaria balsa, La Balsa de la Medusa, en la que el hambre, la sed, la desesperación, el horror… les llevó al suicidio, al canibalismo y a la locura. Sólo 15 lograron sobrevivir tras semanas a la deriva. Entonces se enfrentaron a juicios y encarcelamientos con los que se intentó ocultar el criminal proceder de los oficiales.


Si luchamos entre nosotros ninguno nos salvaremos. Antes de que sea tarde debemos reconocer quién es el enemigo y unirnos contra él.


Hago una llamada a los jóvenes, a los estudiantes, a los desempleados, a los funcionarios, a militares y policías, a los pequeños y medianos empresarios, a los trabajadores… Unámonos, todos somos las víctimas.


La incompetente, irresponsable y traidora jerarquía política y económica procura dividirnos; nos azuzan a unos contra otros; quieren generalizar una guerra entre pobres en la que nos debilitemos y disipemos nuestra fuerza.


Sólo tenemos la opción de unirnos.
 

El embarcadero (La jetee) Chris Marker


¡Fuertes disturbios en Londres!


El telar de la locura


De la palabra



El lenguaje

describe el mundo,

la palabra tajante

lo transforma.

Del miedo a la libertad


sábado, 27 de agosto de 2011

arte y revolución

El arte 
ya te ha mostrado 
la realidad de 
tus deseos,
ahora
es el momento 
de tener valor para 
realizarlos.

Sobre el diálogo y la palabra

Naná 
filosofa sin saberlo


¡Crisis! ¿What crisis?


La gran estafa

La gran estafa
(¡De verdad que no fue adrede!...
¡Creedme!)


Paso 1.
Los sabios impostores paniaguados aventan la promesa del crecimiento continuado sin fin: ¡Todos capitalistas con chalecito en la playa y para desayunar cada día caviar con carajillo! ¡Tomad créditos para realizar ahora los caprichos que os hemos insuflado!
Hasta los ositos de peluche tiran de tarjeta de crédito.
Los bancos ganan.

Paso 2.
Los bancos se ceban con los intereses y sobre todo creando dinero: por cada unidad de crédito crean cien unidades de dinero.
Los bancos siguen ganando.

Paso 3.
Por una parte no se pueden devolver los créditos pero lo más grave es que no se puede socialmente respaldar con bienes y trabajo toda la enorme masa de dinero creado. Los bancos se quedan con las viviendas. Los Estados se ven obligados a inyectar capital en los bancos para que todo el sistema financiero no se hunda. Es el dinero de los impuestos de quienes trabajan.
Los bancos ganan más (y ponen sus divisas a buen recaudo en los paraísos fiscales ¡Qué no se pierda ni un céntimo! ¡Por las criadillas de Cristo!)

Paso 4.
El flujo de créditos que estimulaba artificialmente la economía cesa de repente y sobreviene una crisis con disminución del consumo y la producción, y, por consiguiente, pérdida de empleo masiva.
Los bancos, por supuesto, siguen ganando.

Paso 5.
Para remontar la crisis Los gobiernos ya endeudados por rescatar los bancos recortan los derechos sociales. Los sindicatos respaldan las medidas: "todos debemos empujar hacia el mismo lado".
Ya no sorprende que los bancos continúen ganando.

Justicia poética:

conocemos a los culpables y los recompensamos,
conocemos a las víctimas y las exprimimos.

¿Cómo se llama la película?:
"Cornudo consentido, apaleado y todos contentos"

¡Cuidado, que con las puntas araño el techo!

La evolución de las costumbres


Estrategias de manipulación de masas

Ante la llegada de la campaña electoral para las próximas elecciones de noviembre, y también de un otoño que parece llegará calentito en general, creemos que es especialmente oportuno, necesario, un repaso a las famosas 10 estrategias de manipulación de masas, explicadas por el lingüista y pensador Noam Chomsky de forma clara y contundente:




 1. La estrategia de la distracción  
El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las elites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes. La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética. ”Mantener la Atención del público distraída, lejos de los verdaderos problemas sociales, cautivada por temas sin importancia real. Mantener al público ocupado, ocupado, ocupado, sin ningún tiempo para pensar; de vuelta a granja como los otros animales.

2. Crear problemas y después ofrecer soluciones.  
Este método también es llamado “problema-reacción-solución”. Se crea un problema, una “situación” prevista para causar cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O también: crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos.

3. La estrategia de la gradualidad.  
Para hacer que se acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es de esa manera que condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de 1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad, flexibilidad, desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una sola vez.

4. La estrategia de diferir. 
 Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla como “dolorosa y necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá mejorar mañana” y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el momento.

5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad. 
 La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discurso, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante. Por qué? “Si uno se dirige a una persona como si ella tuviese la edad de 12 años o menos, entonces, en razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico como la de una persona de 12 años o menos de edad.

6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión.  
Hacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido critico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos…

7. Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad.  
Hacer que el público sea incapaz de comprender las tecnologías y los métodos utilizados para su control y su esclavitud. “La calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia que planea entre las clases inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca imposibles de alcanzar para las clases inferiores.

8. Estimular al público a ser complaciente con la mediocridad. Promover al público a creer que es moda el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto…

9. Reforzar la autoculpabilidad. 
 Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se autodesvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de su acción. Y, sin acción, no hay revolución!

10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen.  
En el transcurso de los últimos 50 años, los avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los conocimientos del público y aquellos poseídas y utilizados por las elites dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el “sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos.

Rapsodia y prosodia de la indignación